La construcción del templo data de principios del siglo XVIII. Los intelectuales, políticos y militares más destacados de la historia dominicana descansan en esta antigua iglesia, que formaba parte del monasterio de la Compañía de Jesús.
En 1767, el rey Carlos III ordenó la expulsión de todos los jesuitas que habitaban sus dominios. En etapas sucesivas, la iglesia se convirtió en almacén de tabaco, seminario, teatro y oficina del Tesoro Nacional, hasta su restauración en 1958.
Horario de visita:
Martes a domingo, de 9:00 a. m. a 5:00 p. m.